En el mes de diciembre incorporamos un equipo de radiofrecuencia. También se le puede llamar diatermia o TECAR y tiene multitud de beneficios. Puedes ampliar la información en la página de tratamientos. En esta entrada os voy a dar mi feedback con los pacientes que la he utilizado.
En primer lugar, su efecto analgésico es real. He tenido un par de pacientes a los que no podía tocar por el dolor tan alto que tenían y tras usar la radiofrecuencia he podido tratarles de forma normal.
Como prometen, reduce el tono muscular. Tras tratar a los pacientes, el músculo se encuentra mucho más manejable y, además, lo conseguimos sin que el paciente sufra, por lo que la sesión es más agradable.
Respecto a si reduce la inflamación y el edema, aún no he tenido un paciente agudo (dentro de las primeras 48h tras lesión) para comprobarlo con este equipo. Aunque he trabajado con otras marcas previamente y mejoraba de forma notable.
Si hablamos de patologías concretas, hemos tenido muy buenos resultados en tendinopatía y también nos está ayudando con las adherencias producida por una rotura muscular. Anteriormente ya he mencionado su buen hacer en los dolores irritativos, por lo que para nosotros ahora es un tratamiento de primera línea.
Por último, voy a mencionar algo nuevo que me enseñaron en la formación y me resulta muy interesante. Además, lo he probado con muy buenos resultados. Creo que conoceréis la punción seca, sino os la presento aquí. La principal característica de la punción seca es la rección de espasmo local y el dolor que produce, es una técnica ciertamente molesta. Pues gracias a la radiofrecuencia, podemos hacerla mucho más llevadera utilizando un programa que permite utilizar la aguja como canalizador de la radiofrecuencia. De este modo, la técnica se soporta mejor y con menos dolor postpunción. ¿Que os parece?